Hacer una camisa es uno de esos desafíos que te cambian la vida. Si podés hacer una camisa podés hacer todo. El día del padre es una gran excusa para intentarlo.
El molde de esta camisa es M, y es un poco entallada. Para un padre joven diremos.
Si necesitamos, podemos rectificar los laterales, y simplemente hacer un camisa clásica.
MATERIALES
1,5 metros de algodón camisero
14 botones
Costo: $75 (telas mary, parana 5627, villa adelina)
$28 botones camiseros
$25 entretela francesa
PROCEDIMIENTO:
CORTE:
Vamos a comenzar ubicando los moldes sobre la tela.
Siempre resulta más cómodo colocar la tela doblada al medio, para que todas las piezas salgan por dos.
El centro de la espalda debe estar justo sobre el dobles de la tela, y en esta prenda es la única pieza que pondremos así.
Como estamos trabajando con tela escocesa, vamos a ocuparnos de alinearla bien, para que el corte no quede torcido. Si no prestamos atención a esto es muy común que la tela de abajo quede levemente inclinada y que al abrir el corte se note mucho que una manga esta derecha y la otra torcida.
Mas adelante veremos también cómo podemos hacer para que las lineas coincidan.
Las piezas con mas visibilidad pueden ubicarse pensando qué color nos gustaría que se vea. Por ejemplo, el cuello y la tirilla son piezas suficientemente finas como para poder decidir si queremos que se vean mucho azul o la línea roja.
Lo mismo sucede con el puño. Muchas veces se coloca al bies, para que el escoces se vea cruzado. (obviamente en la imagen está al hilo)
Ni la Birkin de Hermés, ni la 2.55 de Chanel, ni la Motorcycle de Balenciaga. Lo que ahora se lleva son las carteritas inspiradas en objetos de la vida cotidiana. El año pasado, Chanel presentó su reinterpretación del frasco del perfume No. 5 en versión cartera negra o transparente para llevar lo mínimo indispensable. Y no conforme con eso, en la última colección crucero, Lagerfeld convirtió la clásica cartera de la firma en un bidón de nafta. Hace unos meses, Moschino se inspiró en McDonalds para crear una línea de bolsitos con forma de vaso de plástico, de cajita de papas fritas y de cajita feliz. La diseñadora británica Anya Hindmarch presentó una colección de carteras que parecieran salidas del supermercado: sobres con el logo del jabón Ariel, tote bags que parecen cajas de Zucaritas y una variedad de clutchs que van desde simulaciones de cajas de fósforos hasta paquetes de papitas brillantes y crujientes aptos para alfombras rojas. Kate Spade tiene mini carteras con forma de disco de vinilo y una edición hermosa de sobres que parecen libros de tapa dura con nombres de novelas inventadas acordes a distinto eventos. La colección crucero de Charlotte Olympia propone un mix de mini carteras de radio vintage, de cámara de fotos estilo Instagram y de revistas enrolladas, entre otros modelos. Ojalá acá también se inspiren y esta primavera podamos guardar la billetera en un sachet de leche La Serenísima o en un pote de Casancrem light. 
